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saguiere (host138.200.61.133.ifxnw.com.ar - 200.61.133.138)
Calificación: N/A Votos: 0 (Votar!) | Enviado martes, 06 de agosto, 2002 - 09:29 pm: |
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| Buenos Aires, 5 de Agosto de 2002 Sr. Secretario de la Organización de Estados Americanos Comision Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) 1889 F St., NW Washington, D.C., USA 20006 e-mail: cidhoea@oas.org S/D De nuestra consideracion: Tengo el agrado de dirigirme a Vd. a los efectos de plantear una de las violaciones de derechos humanos mas fundamentales que sufren los investigadores cientificos de los paises perifericos, la de los derechos de informacion y comunicación garantizados por las respectivas Constituciones Nacionales. Esta necesidad de quebrar el absoluto aislamiento e incomunicacion en que yacen los organismos de ciencia y sus respectivos investigadores, con respecto a las aranceladas Bases de Datos bibliograficas y hemerograficas existentes en la Red virtual, se vuelve cada vez mas impostergable. La importancia acuciante que tienen estas Bases de Datos (o nueva Biblioteca de Alejandria) para la calidad de nuestras investigaciones y para un pais que pretenda hacer eje en el conocimiento cientifico como plataforma para su despegue economico y cultural (tales han sido los casos de Irlanda y Finlandia) esta demas que la enfatice en este escrito. Nos encontramos hoy en circunstancias semejantes a las que algunos paises atrasados de Europa padecieron durante el Renacimiento, cuando Guttenberg descubrio la imprenta, obligados a seguir leyendo en pergaminos, papiros y tablillas de arcilla. Mas aun, la fenomenal incomunicacion en que nos hallamos se ha agravado por cuanto el numero de las Bases de Datos aranceladas existentes en la Red se multiplica a diario. Por el contrario, en las antipodas de esta conducta irracional, los gobiernos del area Latinoamericana estan buscando por todos los medios romper la incomunicacion financiera que sus paises padecen con los organismos de credito internacional. Entendemos que esta contradiccion entre ambas conductas es en realidad un doble discurso y una hipocresia. Esta contradiccion en las practicas y esta hipocresia en los discursos, que ninguna crisis puede justificar, agravia a los investigadores, incentiva el exodo de las generaciones de cientificos mas jovenes, y ahuyenta toda posibilidad de retorno de aquellos graduados que quisieran volver a sus respectivos paises. Esta realidad de diaspora, que los economistas de los establishments oficiales no computan en la balanza de pagos y en los supuestos endeudamientos externos contraidos sugiere un nuevo interrogante ¿cuánto es lo que los paises acreedores nos deben por nuestras exportaciones de materia gris? Las metropolis centrales quieren que les paguemos los royalties y los copyrights pero no son capaces de retribuirnos por la materia gris exportada. Asimismo, algunas instituciones universitarias privadas se hallan suscriptas a algunas de dichas Bases de Datos, y esta desigual situacion aumenta aun mas la brecha cualitativa entre las instituciones publicas y las instituciones privadas. Para rematar el argumento, los estudiantes e investigadores de las Universidades y organismos publicos solo les queda romper con las claves secretas y hackear dichas Bases, con todos los riesgos personales e institucionales que ello implica. Mas aun, la contradiccion y la hipocresia podrian ser parcialmente reparadas si se castigaran los gastos superfluos y parasitarios, se reasignaran partidas, y se reclamara lo que presupuestariamente le debe corresponder al sistema cientifico. Por el contrario, los organismos de ciencia permanentemente sufren quitas en su presupuesto e incurren en gastos suntuarios que bien podrian ser destinados para los objetivos arriba señalados. Estos mismos organismos de ciencia han venido boicoteando sistematica y ostensiblemente la subscripcion a las Bases de Datos de publicaciones periodicas, tales como J-Store, Pro-Quest, Electronic Reference Library, Elsevier, Carfax, Sage, Kluwer, Blackwell, II Mulino, Swets Backsets Service, Frank Cass, Chadwyck-Healy, Bell Howell, Gale´s Ready Reference Shelf, Project Muse y HAPI, entre otras muchas Bases de Datos existentes en el mundo, en beneficio de onerosos y superfluos viaticos y gastos de mantenimiento de ciertos Institutos cuyo rendimiento y relevancia academica y cientifica dista mucho de ser permisible y/o tolerable. Sin embargo, los gobiernos de estos paises persisten en privilegiar la resolucion de la incomunicacion financiera con la Banca usuraria internacional, sin consideracion alguna para con la incomunicacion cientifica y cultural que padecemos, condenandonos a practicar una ciencia periferica incapaz de competir con las investigaciones de punta practicadas en los centros cientificos de los paises centrales. Cordialmente, Eduardo R. Saguier Investigador Independiente del CONICET http://www2.h-net.msu.edu/announce/show.cgi?ID=130901
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