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Luis_carlos
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Username: Luis_carlos
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Votos: 0 (Votar!) | | Enviado viernes, 25 de marzo, 2011 - 07:11 pm: | 
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| (Continuación del estudio: Acerquemonos a Dios)
La Paz del Eterno, y bendiciones para todos, espero que este pequeño estudio nos ayude en nuestro crecimiento espiritual y conocimiento de la Palabra de Dios.
El siguiente tema es: "considerémonos unos a otros para estimularnos al amor y a las buenas obras"
Lectura: Hebreos 10:22-25.
“Acerquémonos con corazón sincero, en plena certidumbre de fe, purificados los corazones de mala conciencia, y lavados los cuerpos con agua pura (Ez 30:25). Mantengamos firme, sin fluctuar, la profesión de nuestra esperanza, porque fiel es el que prometió. Y considerémonos unos a otros para estimularnos al amor y a las buenas obras; no dejando de congregarnos, como algunos tienen por costumbre, sino exhortándonos; y tanto más, cuanto veis que aquel día se acerca”.
Tercer deber: Considerarnos unos a otros.
Considerarnos, para estimularnos al amor y a las buenas obras.
Jesús dijo: “Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras, y glorifiquen a vuestro Padre que están los cielos” Mateo 5:16.
¿Qué significa la palabra considerar?
Considerar significa:
Pensar, reflexionar [una cosa] con atención.
Tomar en consideración [un asunto, propuesta, etc.].
Tratar [a uno] con urbanidad y respeto.
Entonces es: Prestar atención a, fijar la atención en, cuidar de manera continua, protegernos unos a otros.
¡Qué consejo tan maravilloso!
La Palabra de Dios dice en 1 Tesalonicenses 3:12: “Y el Señor os haga crecer y abundar en amor unos para con otros y para con todos”.
Entonces se nos exhorta a que:
+ Prestarnos atención unos a otros.
+ Fijar la atención en cada uno de nosotros.
+ Cuidarnos unos a otros de forma continua.
+ Protegernos unos a otros.
¡Qué diferente sería la iglesia, y cuan fuerte seriamos en Cristo, si pusiéramos atención a esta exhortación!
¿A que debemos prestar atención?
A asegurarnos de que estamos estimulados y que vivimos para Cristo, que nos amamos unos a otros y que hacemos buenas obras.
Jesús dijo: “Un mandamiento nuevo os doy: Que os améis unos a otros; como yo os he amado, que también os améis unos a otros. En esto conocerán todos que sois mis discípulos, si tuviereis amor los unos con los otros Juan 13:34-35.
Sencillamente:
+ Que nos consideramos unos a otros
+ Que nos preocupamos unos a otros.
La Palabra de Dios dice en Gálatas 6:2: “Sobrellevad los unos las cargas de los otros, y cumplid así la ley de Cristo”.
+ Que satisfacemos nuestras necesidades mutuamente.
Jesús dijo: “El que tiene dos túnicas, dé al que no tiene; y el que tiene qué comer, haga lo mismo” Lucas 3:11.
(Veamos Deuteronomio 15:7-9)
(Veamos Santiago 2:14-17)
+ Que nos fortalecemos en nuestras debilidades.
La Palabra de Dios dice en Romanos 15:1: “Así que, los que somos fuertes debemos soportar las flaquezas de los débiles, y no agradarnos a nosotros mismos”
Y en 1 Tesalonicenses 5:14, dice: “También os rogamos, hermanos, que amonestéis a los ociosos, que alentéis a los de poco ánimo, que sostengáis a los débiles, que seáis pacientes para con todos”.
+ Que nos ayudamos unos a otros durante las pruebas y las tentaciones.
La Palabra de Dios dice en Isaías 35:3-4: “Fortaleced las manos cansadas, afirmad las rodillas endebles. Decid a los de corazón apocado: Esforzaos, no temáis…”.
Esto quiere decir que amemos, que amemos con acciones y no de palabra.
La Palabra de Dios dice en Romanos 12:9: “El amor sea sin fingimiento. Aborreced lo malo, seguid lo bueno”.
Y en 1 Juan 3:18, dice: “Hijitos míos, no amemos de palabra ni de lengua, sino de hecho y en verdad”.
+ Alimentamos a los pobres.
La Palabra de Dios dice en Proverbios 14:31: “El que oprime al pobre afrenta a su Hacedor; Mas el que tiene misericordia del pobre, lo honra”.
+ Visitamos a los enfermos, y presos.
La Palabra de Dios dice en Hebreos 13:3: “Acordaos de los presos, como si estuvierais presos juntamente con ellos; y de los maltratados, como que también vosotros mismos estáis en el cuerpo”.
+ Cuidamos de los huérfanos, y viudas.
La Palabra de Dios dice en Isaías 1:17: “Aprended a hacer el bien; buscad el juicio, restituid al agraviado, haced justicia al huérfano, amparad a la viuda”.
+ Hacemos amistad con los que se sienten solos.
+ Damos orientación y consejos a quien no le han dado un verdadero propósito a sus vidas.
La Palabra de Dios dice en Santiago 1:27: "La religión pura y sin mácula delante de Dios el Padre es esta: Visitar a los huérfanos y a las viudas en sus tribulaciones, y guardarse sin mancha del mundo".
(Veamos Mateo 25:31-46)
Bendiciones a todos.
Shalom.
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